jueves, 23 de agosto de 2007

Atmosphere

Aprovechando que Anton Corbijn está a punto de estrenar Control, el biopic que ha realizado (en escrupuloso blanco y negro, claro) sobre Ian Curtis, he aquí el vídeo-homenaje que el director holandés realizó en 1988 para una de las mejores canciones que se han hecho nunca, en escrupuloso blanco y negro.

martes, 21 de agosto de 2007

Hot Fuzz


Las distribuidoras no paran últimamente de protestar por la crisis de la industria del cine, y tardan poco en echar las culpas a los aficionados y a internet. Y tienen razón. Somos unos desalmados, y no valoramos como se debería el trabajo de las santas distribuidoras, que no paran de esforzarse por el bien del cine. Pongamos como ejemplo esta película, Hot Fuzz, película británica estrenada a principios de 2007 en su país de origen y poco después en EEUU, en ambos sitios con muy buenas críticas y cifras de taquilla razonables. Pero no en España, claro, porque nuestras distribuidoras nos quieren tanto que en vez de, simplemente, estrenarla, nos hacen sentir especiales al gastar bastante tiempo y dinero en doblar el film, con el consabido esfuerzo que supone el cargarse las actuaciones de los intérpretes y probablemente la mitad de las gracias del film. Ah, y contratan a un grupo de luminarias que deciden que el título es muy vulgar, y que mejor cambiarlo por algo como “Arma Fatal”, que queda mucho más chulo. Bueno, y retrasan su estreno aquí unos nueve meses, para que por entonces ya haya salido en dvd en su país de origen y circule por internet un bonito ripeo con buena calidad y unos subtítulos que nos permitan ver la versión no-mutilada de la película. Y claro, nosotros nos la descargamos, porque somos así de malos, y la vemos.

Hot Fuzz es la nueva película de los tipos que hicieron la genial Shaun of the dead (aquí “traducida” como “Zombies Party”), esto es, el director/guionista Edgar Wright, el actor/guionista Simon Pegg y el cómico Nick Frost. Pegg intepreta a Nicholas Angel, un superpolicía de Londres, tan bueno que sus compañeros están hartos de que les eclipse por lo cual consiguen que le trasladen a Sandford, un pequeño pueblo de la campiña británica donde aparentemente nunca pasa nada, pero con un alto nivel de “extraños accidente”. Allí se hace rápidamente amigo de Danny Butterman (Frost), un policía torpe y algo infantil obsesionado con las películas de acción policíaca y que siente que se está perdiendo la acción de la profesión. Y soy incapaz de explicar más sin volver a referirme a Shaun of the Dead. Para los no iniciados, aquella era, simplificando, una parodia del cine de zombies. Pero era algo más, era una peli de zombies. Quiero decir, una hilarante y llena de referencias, pero una película coherente e inteligente, lejos de esas parodias descerebradas tipo Scary Movie que suelen venir de los USA. Y es necesario entender eso para entender Hot Fuzz, una película de acción llena de referencias al género (especialmente las buddy movies tipo, sí, Arma Letal), espectacular y con un ritmo trepidante, tanto que a veces parece ser una más del género, mimetizando con tanta precisión el cine de gente como Michael Bay que asusta, pero que en todo momento no hace más que imitar todos los clichés del género y darlos la vuelta para crear una de las comedias más inteligentes desde, probablemente, la anterior película del trío responsable del film. Y, además, es prácticamente inmaculada técnicamente, con un montaje y unos efectos perfectos, y con unas actuaciones brillantes tanto del tándem Pegg/Frost como del resto del reparto, que incluye a ilustres secundarios británicos como Timothy Dalton, Jim Broadbent, Paddy Considine, Bill Nighy o Steve Coogan.

Siento haberme espesado tanto, pero sólo intento explicar bien qué es y qué no es esta película. Porque, cuando decidan estrenarla, aparte de la infame traducción seguro que veremos cómo intentan ocultar la verdadera intención de la película camuflándola como una simple película de acción, pero nunca publicitándola tanto como para que la mayoría del púbico se entere de que existe, logrando una vez más que una buena película pase totalmente inadvertida en nuestro país y acabe relegada al olvido al que enviaron a su predecesora. Y es una lástima, porque es fácilmente una de las mejores películas del año.
Nota: 8